Hazlo en su casa
El lugar de la ruptura es importante. En caso de que hayas estado saliendo con él por más de seis semanas, es necesario que terminen en persona. Merece la oportunidad de verte a los ojos y ver que no es una ruptura casual.
No asumas que va a armar una pelea, una escena o a llorar. No lo hagas llorar en un restaurante. A ti no te gustaría eso, así que no se lo hagas a él. Olvídate de los sitios públicos.
El momento es crucial
No lo hagas justo después de que se haya muerto un familiar suyo. No lo hagas después de que lo hayan despedido de su trabajo. No lo hagas después de que te haya dicho que te ama la primera vez. Hay una larga lista de “No lo hagas”, así que tal vez lo más fácil sea que te diga cuando es el momento perfecto para hacerlo: temprano en la tarde (así si quiere ir a tomarse un trago después, puede hacerlo y quedar con sus amigos), en estado de sobriedad y no en medio de etapas de la relación/crisis de vida.
Nunca digas “No eres tú, soy yo”
No le salgas con esa basura de “no eres tú, soy yo”. Si hay una razón específica por la que estás terminando con él, dila y no vaciles. Decirle que no confías en él porque te fue infiel o porque está saliendo con alguien más son razones comprensibles para terminar. Dile cuál es la razón y listo.
Si la razón por la que estás terminando es más vaga, este es un mensaje bastante claro y que los hombres entienden muy bien: “Odio decirte esto, pero quiero ocuparme de mis propios asuntos. Simplemente no es un buen momento para mí para involucrarme en una relación”. No es un “no eres tú, soy yo” o “no puedo estar contigo porque soy un desastre”. Se trata del momento y de que no quieres estar en una relación. Los hombres entienden eso.
No puedes hacerte responsable por cómo una persona reacciona cuando cortas con ella, pero puedes intentar bajarle el ánimo lo menos posible.