Todos sabemos que la piel blanca es más delicada y la que más cuidado requiere. Durante muchísimo tiempo, las mujeres con esta tonalidad de piel evitaban a toda costa broncearse, pues su apariencia clara era un símbolo de buena clase. Hoy las cosas han cambiado, sin embargo, el cuidado de este tipo de piel aun se mantienen e incluso han aumentado debido a los muchos riesgos de salud.
- Detecta los problemas. La piel blanca es muy sensible, su tono es apagado y hay una falta de luminosidad en el rostro, por esta razón requieren de una hidratación extrema. Otros problemas como irritación, espinillas y vasos sanguíneos rotos deben ser atendidos con cremas adecuadas que contengan aloe vera, manzanilla u otro elemento natural para mejorar la apariencia.
- Protector solar. El principal enemigo es el sol. Usa a diario un buen protector solar, independientemente de la época del año. La página web Uncomo.com señala: “Lo más aconsejable es que la crema solar sea de factor 30 o superior”. Con ello evitas, no solo que la piel se queme, sino que te ayudará a prevenir las tan indeseables arrugas y manchas. Si, por lo general, estás muy expuesta al sol, utiliza también una gorra o sombrero. Recuerda que el sol es implacable.
- Hidratación. La piel blanca es muy propensa a ensuciarse, sufrir de alergias o presentar manchas. Se aconseja exfoliarla e hidratarla constantemente. La página bellezayalma aconseja: “…durante la noche opta por una crema que contenga ácidos de alfa-hydroxy o retinol para ayudar a acelerar la regeneración celular.”
- Alimentación. La alimentación es primordial en el cuidado de tu piel. Consumir frutas y verduras te aportará vitaminas antioxidantes. Evita las grasas y el abuso de azúcar. Hábitos como el consumo de alcohol y tabaco afectará seriamente la salud de tu piel.
- Maquillaje. El maquillaje que utilices debe ser especialmente para el tono de tu rostro. Las bases deben ser de la misma tonalidad para evitar verte como una máscara. El corrector de ojeras debe ser más claro que el tono de tu piel, pues además le dará luminosidad. No te sobrecargues con las sombras o la máscara de pestañas.
- Cuidado con el clima. Los cambios bruscos de temperatura pueden afectar el bienestar de tu piel. El frío ocasiona la rotura de los vasos sanguíneos y la aparición de las manchas. Toma tus precauciones al respecto.
- Edad. A partir de los 30 años los problemas se acentúan. Presta atención a la flacidez y al descolgamiento. Usa cremas que te ayuden. No tienen que ser costosas, pero sí debes ser disciplinada en usarlas todos los días.
Extremar todas las precauciones en el cuidado de tu piel es la única garantía para mantener tu salud.